El obispo de la Diócesis de Saltillo, Hilario González García, ofreció una bendición especial a los nuevos alcaldes de Coahuila, exhortándolos a cumplir con sus promesas de campaña y a trabajar por el bienestar de sus comunidades.
Llamado al compromiso y honestidad
En su mensaje, el obispo destacó la importancia de la transparencia, la honestidad y las buenas prácticas en la administración pública.
“Es necesario que los alcaldes cumplan con lo que prometieron en campaña. Sabemos que es un reto, pero también una responsabilidad que deben asumir con seriedad y compromiso”, enfatizó.
Asimismo, hizo un llamado a la colaboración entre las instituciones y la ciudadanía para alcanzar el bien común. Resaltó que la participación ciudadana es un rasgo positivo en el estado de Coahuila y que es fundamental para lograr avances en áreas prioritarias como educación, salud, seguridad, vivienda y transporte.
Apertura del año jubilar
Durante su visita a Monclova, el obispo también encabezó la apertura del Templo Jubilar Santiago Apóstol, ubicado en el centro de la ciudad. Este acto forma parte del año jubilar convocado por el Papa Francisco, que comenzó el pasado 24 de diciembre y se extenderá hasta el 25 de diciembre de 2025.
En esta vicaría, los templos jubilares designados son Santiago Apóstol en Monclova y Sagrado Corazón de Jesús en Frontera, lugares donde los fieles podrán vivir este tiempo de gracia y reflexión.
Significado del año jubilar
El obispo explicó que el año jubilar es una oportunidad de reconciliación, esperanza y renovación espiritual. Entre los signos destacados se encuentran el bautismo, el perdón y la compasión, elementos fundamentales para reforzar la identidad cristiana católica y superar las heridas emocionales y espirituales.
“El Papa Francisco nos invita a ser peregrinos de esperanza, recordando que podemos superar nuestras dificultades y vivir con júbilo. Este año también es un llamado a compartir lo que tenemos y a liberarnos de las esclavitudes que nos impiden ser plenamente felices”, señaló.
El obispo finalizó exhortando a todos los fieles, y también a quienes no profesan la fe cristiana, a aprovechar este tiempo para reflexionar sobre sus vidas y buscar la paz y el bienestar integral.