Coatzacoalcos, Veracruz.— A seis años del inicio de su construcción, una minirrefinería ilegal para procesar huachicol operaba con total impunidad en el sur de Veracruz, bajo la fachada de una planta de tratamiento de residuos industriales llamada Energía Ecorenovable S.A. de C.V..
De acuerdo con un análisis de imágenes satelitales de Google Maps, en agosto de 2019 comenzó la deforestación del terreno, ubicado cerca de la carretera Coatzacoalcos-Villahermosa, sin que se registrara alguna denuncia o inspección oficial.
- 2017: El predio estaba cubierto de árboles y vegetación densa.
- 2019: El terreno ya se encontraba desmantelado y con camiones, láminas metálicas y cercas improvisadas.
- 2021-2022: Aparecen estructuras metálicas, grúas, almacenes, bardas de tabique y señalizaciones de “área privada” y “zona electrificada”.
- 2023-2024: Se instalaron cámaras de vigilancia, un tubo de gran tamaño, un tráiler y un tanque de almacenamiento de combustible.
Pese a su crecimiento evidente y la proximidad a una torre de alta tensión de CFE, nunca se colocaron permisos de obra ni señalamientos legales. El terreno fue intensamente deforestado y convertido en una planta que hoy se asemeja a una refinería artesanal de tres niveles, donde también se han hallado evidencias de movimiento constante de vehículos pesados.
La empresa Energía Ecorenovable, responsable del sitio, inició su actividad mucho antes de la construcción. En publicaciones de 2017 en redes sociales, ofrecía empleos a químicos analíticos con maestría o doctorado, preferentemente con experiencia en cromatografía de gases, y dispuestos a radicar en Villahermosa.
La persona encargada de reclutar era Valentina Dionicio, identificada como apoderada legal de la firma.
A pesar de estar ubicada a la vista de cualquier satélite, autoridad local o incluso de la población, ninguna instancia federal, estatal o municipal intervino en la zona durante años.
Este caso expone graves fallas en la supervisión ambiental, energética y urbana, especialmente en un estado clave para el sector petrolero como Veracruz.
- El gobierno federal aseguró recientemente la instalación como parte de una ofensiva contra el robo de combustible.
- Se investiga si la planta estuvo involucrada en redes de distribución clandestina de hidrocarburos.
- La Fiscalía General de la República y autoridades ambientales ya analizan posibles delitos federales relacionados con huachicoleo, deforestación, uso de suelo, y falsificación de permisos.
