La devoción y la esperanza se hicieron presentes en Monclova durante la tradicional Peregrinación Guadalupana, que este año tuvo un significado especial al denominarse peregrinación de ciudad. Miles de fieles católicos se unieron en un recorrido cargado de fe para venerar a la Virgen de Guadalupe y elevar oraciones por soluciones al problema económico de Altos Hornos de México (AHMSA), que afecta a numerosas familias de la región.
Un evento que une generaciones y corazones
Desde temprano, cientos de feligreses comenzaron a reunirse en el punto de partida, el emblemático lugar conocido como Ave Fénix. A medida que avanzaba la mañana, el número de participantes creció exponencialmente, con la llegada de grupos parroquiales que integraron carros alegóricos representando pasajes de la vida de la Virgen de Guadalupe.
El ambiente era una mezcla de solemnidad y alegría, con personas de todas las edades formando parte del contingente. Ancianos, jóvenes y niños caminaron juntos por las calles principales del centro de Monclova, reflejando el compromiso y la devoción que caracterizan a esta comunidad.
Un recorrido lleno de simbolismo
El trayecto de la peregrinación incluyó calles emblemáticas de la ciudad. Al llegar al cruce de las avenidas Pape y Carranza, los peregrinos tomaron la dirección hacia Monterrey, avanzando en procesión hasta el Santuario de Guadalupe, lugar donde ya los esperaban cientos de católicos.
El santuario, decorado especialmente para la ocasión, se convirtió en el punto culminante del recorrido. Allí se sumaron familias enteras que año tras año participan en este evento, considerado uno de los más significativos dentro del calendario litúrgico de la iglesia católica. La unidad y la devoción se hicieron palpables en cada canto, oración y muestra de fe dedicada a la Reina del Tepeyac.

Un cambio en el contexto, no en la fe
Por décadas, esta peregrinación fue conocida como la Peregrinación de los Trabajadores de AHMSA, en honor a la empresa que representaba el pilar económico de la ciudad. Sin embargo, la crisis que atraviesa la compañía ha modificado el enfoque del evento, llevándolo a representar a toda la comunidad monclovense.
La nueva denominación peregrinación de ciudad resalta la unidad y fortaleza de los habitantes de Monclova ante los desafíos actuales. Este año, además de las tradicionales peticiones de salud y bienestar, muchas plegarias estuvieron dirigidas a encontrar una solución al conflicto de AHMSA, que ha generado incertidumbre, migración laboral y desintegración familiar en la región.
Tradición que trasciende el tiempo
La presencia de carros alegóricos, el esfuerzo de los organizadores y la participación masiva de fieles evidencian que, a pesar de los cambios, el espíritu guadalupano sigue vivo y vibrante en Monclova. Este acto de fe es una muestra del arraigo de las tradiciones y la capacidad de la comunidad para mantenerse unida frente a la adversidad.