La falla de un sensor fue la causa de que los elevadores de la clínica 7 del IMSS dejaran de funcionar, según explicó Humberto Prado Montemayor, consejero estatal de la institución. Indicó que estas averías suceden debido al uso indebido por parte de usuarios, quienes manipulan los controles de manera incorrecta.
Equipos antiguos y malas maniobras
Prado Montemayor detalló que el equipo de los elevadores es antiguo, lo que los hace susceptibles a descomposturas por maniobras inapropiadas. Esto ha ocasionado en diversas ocasiones que tanto personal como derechohabientes queden atrapados en el interior, aunque, afortunadamente, los incidentes no han pasado de ser un susto.
Soluciones propuestas
Ante los resultados de la investigación, el IMSS decidió contratar a una persona capacitada que se encargará exclusivamente de operar los elevadores y prevenir futuros desperfectos. El consejero estatal recordó que anteriormente solo personal asignado manejaba estos equipos, pero esta práctica se abandonó, permitiendo que personal no autorizado y derechohabientes los manipularan.
“Por muchos años, los elevadores eran operados únicamente por personal capacitado. Sin embargo, por razones desconocidas, esa responsabilidad fue retirada, lo que derivó en el uso inadecuado y frecuentes fallas”, señaló Prado Montemayor.
Sin fecha para reactivación
Sobre la fecha de reparación, explicó que dependerá del tiempo necesario para adquirir, instalar y probar el nuevo sensor, asegurando que el equipo funcione sin riesgos. Resaltó la urgencia de reactivar el servicio, ya que diariamente lo requieren personas con movilidad limitada, así como pacientes que van a cirugía.
“Ojalá sea pronto porque este servicio es esencial para muchas personas que no pueden subir escaleras. Esperamos que el proceso se agilice y los elevadores estén en óptimas condiciones lo antes posible”, concluyó.