Monclova, Coahuila. Muertes, familias desintegradas y jóvenes que abandonaron sus estudios son parte del grave saldo social que deja la paralización de Altos Hornos de México (AHMSA), afirmó Julián Torres Ávalos, presidente de la Asociación de Ex Trabajadores de la siderúrgica.
Torres Ávalos lamentó que, a pesar del impacto que ha tenido el cierre de la empresa, las autoridades federales no han dado respuesta concreta sobre el proceso de quiebra ni sobre los compromisos laborales pendientes.
“Son varios los compañeros que murieron esperando el pago de su liquidación. Muchachos que tuvieron que abandonar sus estudios por falta de dinero, familias desintegradas, divorcios… eso es lo que deja este problema”, expresó el dirigente.
Urge intervención del gobierno federal
El representante de los ex obreros señaló que siguen esperando la intervención del presidente de la República para reactivar la planta y evitar que la situación empeore.
Criticó que mientras a los extrabajadores no se les paga un solo peso, se siguen realizando operaciones de venta de activos, lo que calificó como un “saqueo”, y afirmó que a la empresa le conviene que los trabajadores se dividan.
“Respeto los comentarios que hacen, pero de que tenemos fuerza, no hay duda. Al seguir unidos y organizados la lucha se fortalece”, declaró.
Llamado a la unidad entre los trabajadores
Torres insistió en que el movimiento no tiene tintes políticos ni afiliaciones partidistas, y su único fin es la justicia laboral.
“Reitero el llamado a seguir en unidad y no dejarse llevar por comentarios que buscan dividir. Eso es lo que quieren: dividir para vencer”, subrayó.
El dirigente aseguró que continuarán en pie de lucha para exigir la liquidación conforme a los Contratos Colectivos de Trabajo, así como el respeto a sus derechos laborales y humanos.