La administración del presidente Donald Trump ha intensificado su política migratoria con una nueva campaña que alienta a los ciudadanos a denunciar a inmigrantes indocumentados. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha difundido un cartel en la red X (anteriormente conocida como Twitter) que muestra al Tío Sam con el mensaje: “Ayuda a tu país y ayúdate a ti mismo. Denuncia a todos los invasores extranjeros”, junto con el número de teléfono del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) para realizar denuncias.
Este cartel fue inspirado por una imagen previamente compartida por un influencer cristiano extremista, C. Jay Engel, quien aboga por una “contrarrevolución” para expulsar a migrantes no europeos. El gobierno de Trump adaptó esta imagen para promover la denuncia de inmigrantes indocumentados como un acto patriótico.
Expertos en derechos humanos han criticado esta campaña, calificándola de xenófoba y comparándola con prácticas fascistas. Sam Worthington, exdirector ejecutivo de InterAction, señaló que esta iniciativa refleja una ideología nacionalista blanca y utiliza a los migrantes como chivos expiatorios.
Además, un juez federal ha dictaminado que el despliegue de 4,000 efectivos de la Guardia Nacional y marines en Los Ángeles para contener protestas contra las redadas migratorias es ilegal, ya que viola la Décima Enmienda de la Constitución de EE.UU. El juez ordenó devolver el control de estas fuerzas al gobernador de California, Gavin Newsom.
Esta campaña forma parte de la Operación Safeguard, lanzada en enero de 2025, cuyo objetivo es detener y expulsar rápidamente a inmigrantes indocumentados en zonas urbanas, especialmente en ciudades santuario como Los Ángeles. Desde el inicio de esta operación, más de 158,000 personas han sido arrestadas, y más de 142,000 deportadas, incluyendo a miembros del grupo criminal Tren de Aragua.
La administración de Trump también ha implementado políticas como la Ley Laken Riley, que obliga la detención de inmigrantes indocumentados acusados de ciertos delitos graves, y ha lanzado una campaña publicitaria multimillonaria para advertir a los inmigrantes indocumentados que no son bienvenidos en EE.UU.
Estas acciones han generado protestas en varias ciudades, incluyendo Los Ángeles, donde se han realizado manifestaciones contra las redadas y el uso de la Guardia Nacional. El gobernador Newsom ha criticado estas medidas, calificándolas de “intencionadamente incendiarias” y advirtiendo que solo intensificarán las tensiones.
