Monclova, Coahuila; 17 de junio de 2025. A partir de este martes entra en vigor la Ley Silla, normativa que obliga a los empleadores a garantizar que los trabajadores que desempeñan sus labores de pie por largas jornadas cuenten con una silla en su área de trabajo. Esta ley será aplicable en todo el sector productivo, especialmente en aquellas actividades donde se cumple una jornada completa en posición vertical.
El presidente de la CANACO Monclova, Óscar Mario Medina Martínez, informó que la organización iniciará una campaña informativa dirigida a sus agremiados para asegurar que se cumpla con esta nueva disposición legal y evitar sanciones por parte de la Secretaría del Trabajo.
“Se tiene que cumplir con esa ley, colocar sillas en las áreas donde el personal permanece de pie. De igual manera, se debe contar con un área de descanso durante la jornada laboral. Si hay denuncias, la autoridad puede proceder con sanciones”, advirtió Medina Martínez.
El dirigente empresarial destacó que la ergonomía busca mejorar las condiciones laborales de los empleados, especialmente de quienes, por la naturaleza de su actividad, deben permanecer en un solo sitio durante extensos periodos sin contar con un asiento adecuado. Consideró que esta ley reconoce el derecho al descanso físico y mejora la calidad de vida laboral.
En paralelo, Medina Martínez también abordó el tema de la propuesta para reducir la jornada laboral a 40 horas semanales, señalando que su implementación deberá analizarse cuidadosamente. Enfatizó que algunas grandes empresas operan con jornadas continuas que no permiten pausas en la producción.
“Creo que debe ser de aplicación parcial. Incluso, la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio está elaborando un estudio para presentar a los responsables de legislar sobre esta reforma. Su contenido refleja la realidad empresarial y por ello es fundamental aportar esta visión”, expresó.
Con la entrada en vigor de la Ley Silla, los empleadores deberán revisar las condiciones ergonómicas de sus espacios laborales y adecuarlos para cumplir con la normatividad, a fin de evitar sanciones y fomentar ambientes de trabajo más humanos y sostenibles.